Con un lavado de cara impresionante, la fábrica barcelonesa de Honda situada en Santa Perpétua de Mogoda, va a ser la encargada de sacar a la luz la nueva Transalp.
Los cambios están visibles en todo. Empezando por un faro vertical, que da un aspecto imponente a esta nueva Transalp. Siguiendo por la cùpula, podemos optar por dos medidas, una de ellos, siendo 170 mm más alta que la otra. El cuidado por medioambiente, también está visible en la pintura utilizada, que tiene como base el agua. El cuadro de mandos, como no, digital, te ofrece buena información y fácil de ver.
Respecto al apartado de chásis y suspensiones, la marca japonesa ha mantenido las anteriores tal y como estaban, y es que si una cosa va bien, ¿para qué cambiar? se habrán dicho.
Lo que sí han cambiado ha sido la medida de la llanta delantera, pasándolo de 21" que tenía antes, a las 19" actuales. Con este cambio, da la impresión de ser una moto mucho más ligera. Si a esto finalmente le añadimos que a la rueda trasera le han dado más anchura, le sacamos como resultado que en cuanto a estabilidad, va perfecta.
El motor procede de la Deauville y es un bicilíndrico en V a 52º, refrigerada por líquido y que da 680 c.c. También ha aumentado la compresión, pasando de 9,2:1 a 10,1:1 y las bujías están más centradas para mejor combustión. Te ofrece una potencia de 60 Cv y el escape sigue teniendo las 2 salidas de la anterior.
Los frenos delanteros están equipados por 2 discos de 256 mm y pinza de 2 pistones, que pasan a 3 en caso de disponer de ABS. Mientras que el freno trasero lo compone un disco de 240 mm y un pinza flotante de un pistón.
Sus 214 ó 219 (ABS), kilos hacen que sea una moto diseñada más para carretera o pistas fáciles que para meterte por caminos problemáticos.
Fuente de información: Motociclismo.
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